San Aarón. Sacerdote del Antiguo Testamento, de la tribu de Leví, hermano de Moisés.
Santa Monegunda, monja anacoreta (†d. 557). Con el consentimiento de su marido, se recluyó en una celda, en las proximidades de Tours, Francia, donde llevó una vida de ayuno y oración.
Santo Tomás, apóstol.
Santo Heliodoro, obispo (†s. IV-V). Discípulo de San Valeriano, participó en el Concilio de Aquilea, en el 381, contra la herejía arriana.
Santa Isabel de Portugal exorcizando a un poseso – Iglesia de la Tercera Orden de San Francisco, Salvador de Bahía
XIV Domingo del Tiempo Ordinario. Santa Isabel, reina (†1336 Estremoz – Portugal). Beata Catalina Jarrige, virgen (†1836). Terciaria dominica; durante la Revolución francesa ayudó a los sacerdotes no juramentados, proporcionándoles pan y vino para la celebración de la Misa.
San Antonio María Zaccaría, presbítero (†1539 Cremona – Italia).
San Atanasio de Jerusalén, diácono y mártir (†451/452). Diácono de la iglesia de la Resurrección, asesinado por el monje hereje Teodosio, cuya impiedad le había recriminado durante el Concilio de Calcedonia.
Santa María Goretti, virgen y mártir (†1902 Nettuno – Italia).
Santa Nazaria de Santa Teresa March Mesa, virgen (†1943). Monja de origen español fallecida en Buenos Aires. Fundó en Bolivia el Instituto de las Misioneras Cruzadas de la Iglesia.
San Panteno de Alejandría. (†s. III). Hombre de vasta cultura que, por amor a la Palabra de Dios, se dirigió al más lejano oriente para predicar el Evangelio.
Santa Landrada, abadesa (†690). Hija espiritual de San Lamberto y primera superiora del monasterio benedictino de Bilsen, Bélgica.
Santos Agustín Zhao Rong, presbítero, y compañeros, mártires (†s. XVII-XX China).
Beato Fidel Chijnacki, mártir (†1942). Religioso capuchino preso durante la ocupación de Polonia y enviado al campo de concentración de Dachau.
Santa Amalberga, virgen (†s. VIII). Nacida y Rodingi, Bélgica, fue educada en Bilsen por Santa Landrada y recibió de San Wilibrordo el velo de las vírgenes consagradas.
XV Domingo del Tiempo Ordinario. San Benito, abad (†547 Monte Cassino – Italia). San Leoncio, obispo (†c. 570). Brilló en Burdeos, Francia, como constructor y restaurador de edificios destinados al culto.
Santa Inés Lê Thị Thành, mártir (†1841). Madre de familia asesinada en Vietnam durante el reinado del emperador Thiêu Tri por haber ocultado en su casa a un sacerdote.
San Enrique – Iglesia de Santa María dell’Anima, Roma
San Enrique, emperador (†1024 Grone – Alemania).
San Esdras, sacerdote y escriba que, al volver del exilio de Babilonia, congregó al pueblo hebreo disperso y puso gran empeño en que se enseñara y se cumpliera en Israel la Ley del Señor.
San Camilo de Lelis, presbítero (†1614 Roma).
Santa Toscana, viuda (†1343/1344). Tras la muerte de su esposo, se dedicó al cuidado de los enfermos en el hospital de la Orden de San Juan de Jerusalén en Verona, Italia.
San Buenaventura, obispo y doctor de la Iglesia (†1274 Lyon – Francia).
San David, obispo (†c. 1082). Religioso cluniacense de origen inglés, enviado como misionero a evangelizar a los suecos.
Nuestra Señora del Carmen.
Beatos Jugar Sugar, presbítero, y Roberto Grissold, mártires (†1604). Torturados y asesinados durante el reinado de Jacobo I de Inglaterra; el primero por ejercer su ministerio sacerdotal en ese país y el segundo por haberle prestado ayuda.
San León IV, Papa (†855). Defensor de la justicia y apologista del primado de Pedro.
XVI Domingo del Tiempo Ordinario. San Simón de Lipnica, presbítero (†1482). Sacerdote franciscano ilustre por sus predicaciones. Durante una epidemia acaecida en Cracovia, Polonia, se entregó al cuidado de los apestados moribundos, viniendo a fallecer tras contraer la enfermedad.
Santa Macrina, virgen (†379). Hermana de los Santos Basilio Magno, Gregorio de Nisa y Pedro de Sebaste. Versada en la Sagrada Escritura, se retiró para llevar una vida solitaria en el monasterio de Annesis, al norte de la actual Turquía.
San Apolinar, obispo y mártir (†c. s. II Ravena – Italia).
San José Barsabás, discípulo de Jesús. Propuesto por los Apóstoles, junto con San Matías, para ocupar el puesto de Judas.
San Lorenzo de Brindis, presbítero y doctor de la Iglesia (†1619 Lisboa).
Santa Práxedes, virgen (†a. 491). Consta que fue hija del senador romano Pudente, convertido por San Pedro. La basílica que se encuentra en el Esquilino lleva su nombre.
Santa María Magdalena.
San Anastasio, monje (†662). Discípulo de San Máximo el Confesor, murió en el Cáucaso, después de haber soportado la cárcel y la tortura a causa de la fe verdadera.
Santa Brígida, religiosa (†1373 Roma).
San Ezequiel, profeta. Reprendió al pueblo de Israel por sus infidelidades y vaticinó la destrucción de Jerusalén.
San Charbel Makhluf, presbítero (†1898 Annaya – Líbano).
Santa Cunegunda, religiosa (†1293). Hija del rey de Hungría y casada con el príncipe de Cracovia, Polonia, con quien vivió en perfecta castidad. Tras la muerte de su esposo se hizo religiosa clarisa en el monasterio fundado por ella.
XVII Domingo del Tiempo Ordinario. Santiago el Mayor, apóstol. Santa Olimpia, viuda (†408). Habiendo enviudado siendo aún muy joven, se dedicó al servicio de Dios en Constantinopla y fue fiel colaboradora de San Juan Crisóstomo.
San Joaquín y Santa Ana, padres de la Virgen María.
Beatos Vicente Pinilla y Manuel Martín Sierra, presbíteros y mártires (†1936). Durante la guerra civil española fueron sacados por la fuerza de la iglesia y fusilados.
Beata María Magdalena Martinengo, abadesa (†1737). De familia noble, entró como religiosa en el convento capuchino de Brescia. Fue favorecida con fenómenos místicos y dejó escritos que revelan su inusual espiritualidad.
San Sansón, abad y obispo (†c. 565). Propagó el Evangelio y la disciplina monástica en Bretaña, Francia. Fundó la abadía de Dol.
Santa Marta.
San Luis Martin, padre de familia (†1894). Padre de Santa Teresa del Niño Jesús. Llevó una vida matrimonial ejemplar con su esposa, Santa Celia Guérin Martin.
San Pedro Crisólogo, obispo y doctor de la Iglesia (†c. 450 Imola – Italia).
Santas Máxima, Donatila y Segunda, vírgenes y mártires (†304). Asesinadas en la actual Turquía durante la persecución de Diocleciano por negarse a quemar incienso a los ídolos.
San Ignacio de Loyola, presbítero (†1556 Roma).
Beato Juan Colombini, religioso (†1307). Rico comerciante de Siena, Italia, lo abandonó todo y abrazó una vida de extrema pobreza. Fundó la Orden de los Jesuatos.
